jueves, 27 de junio de 2013

Facebook se muere en España

Pues sí. Parece mentira, pero aunque Facebook es el segundo portal con más visitas al día, tiene sus días contados. Por lo menos aquí en nuestro país.

Me explico: una de las tendencias más acusadas que existen en nuestro maravilloso país es la de reventar mercados. O más bien, la de vaciarlos. Sí, creo que más bien nos gusta vaciarlo, porque cuando algo  funciona medianamente bien, muchos se tiran en avalancha para tratar de sacar dinero.

Veamos el ejemplo de Tuenti, la red privada para la juventud a la que todos nuestros chavales están enganchados. Goza de tanto éxito porque, primero: a los jóvenes les gusta tanto porque es mas fácil (y da menos corte) ligar al enviar un privado que conversar cara a cara. Segundo: es privada y no se indexa con Google, con lo cual nadie podrá ver ninguna foto o leer un comentario que se escriba en esta red.

¿Cómo se vició Tuenti? Pues de la siguiente manera: los relaciones públicas de las discotecas y otros locales de ocio nocturno ven que su gran público objetivo está en ella y se pegan todo el día mandando publicidad y ofertas para tratar de que los usuarios acudan a dichos sitios. Pero muy pocos invierten en hacerlo bien y en tener un buen feedback con los chavales.Se limitan a teclear cosas como "quien se apunte en mi lista, dos copas gratis". En definitiva, aburren y corrompen la red.

Y ahora le toca a Facebook. ¿Qué pasa? Pues que cuando las personas de más de 40 años se empiezan a dar de alta en esta red social, que logra que familiares y amigos estén más cerca que nunca gracias a un golpe de clic, vienen las empresas y la infectan y bombardean a base de publicidad. Que si ofertas, descuentos, promociones, etcétera. Volvemos a lo de siempre, aunque la culpa no la tienen la mayoría de las empresas anunciantes. La tiene esas otras que se denominan a sí mismas como "empresas de marketing".

Sí, todo está cambiando y las personas, más. Ahora no somos simples clientes; somos expertos en adquisición de bienes. Estudiamos, comparamos y decidimos si algo va a servirnos. De ahí que un simple anuncio ya no sea suficiente. Y vuelvo a lo mismo: a los usuarios, ¿se les escucha? ¿Les hemos preguntado qué necesitan? ¿Se les ha preguntado qué les gusta?

Y debido a toda esta intoxicación, como bien dice  Inés, responsable de SpeakersCorner, las personas ya no saben dónde almacenar tanta información.



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